EL VERANO - POEMA

EL VERANO
Un compás de espera,
un tiempo que no llega,
almanaque tildado,
computando los días,
restando las horas,
quemando ilusiones,
fabricando nuevos sueños,
que se devora hábilmente
cuando la labor del año
no ha dado los frutos deseados.
Y la tristeza y el desengaño
de ti se ha apoderado.

Gastar las suelas en busca del mango,
redimirse, soportar,
ser esclavo.
Ser marioneta sin dignidad
por el sustento diario.
Y así tragándonos vivos,
se pasan los años,
Pero en este tiempo de espera
la ilusión y los sueños
intentan cambiarlo.
Pocos días bastan
para seguir tolerando,
mínima recompensa
de tanto trabajo.

Cemento que arde bajo
los pies cansados,
agobio de una ciudad hastiada,
caras inertes esperando,
la magia que traerá
una palabra llamada verano.
Un sol ardiente que nos quema,
y en su reflejo
el espejismo de un mar ansiado.

Aglutinamiento de seres,
voces quebrando el aire caliente,
y el arrullo de un mar que no espera,
arena húmeda borrando las huellas,
castillos de ilusiones que el agua se lleva,
Apolos y diosas sus cuerpos dorando,
familias enteras disimulando,
felicidad de unos días,
que se va comprando.

Y cuando llega marzo
todos se han marchado.
la playa vacía y el mar llorando,
en el cielo limpio algunas gaviotas
ensayan su vuelo
buscando migajas
que les regalo el verano.